El secreto de planificar en tu vida te ayuda a direccionar tus acciones, aprovechar tu potencial y lograr lo que más quieres. Iniciemos con estás preguntas:
- ¿Sabes qué quieres de la vida?
- ¿Qué es lo que amas?
- ¿Qué amas hacer?
Si no tienes claro estas respuestas vas por la vida sin un rumbo claro.
Y si tienes las respuestas a esas interrogantes te van a servir las siguientes líneas.
Un día, un niño de seis años de nuestro grupo infantil plantó dos semillas en un vaso de plástico y lo dejó en mi despacho como regalo. Cuando brotaron las llevé a mi casa y planté los tallos en una maceta. Por desgracia, olvidé regarlos y murieron. Las semillas eran buenas y los brotes estaban sanos, si no me hubiera olvidado de ellas, hubieran dado su fruto.
Mientras miraba los pobres gajos muertos pensé:
¿Cuántas semillas habrá plantado el Universo en mí, que yo me olvidé de cuidar?
¿Cuántos sueños he querido realizar y me quedé planificando y no concreté?
La acción; la concreción es el agua que hace que de la semilla salga, se desarrolle y viva la planta. ¿Te quedas soñando? ¿Te quedas planificando? ¿Cuantas semillas en ti han muerto? Cuando leí este cuento no pude pensar menos que en:
- ¿Cuántos talentos tenemos sin desarrollar?
- ¿Cuántas cualidades sin aprovechar?
- ¿Cuántas ideas sin plasmar?
- ¿Cuántos proyectos sin concretar?
- ¿Cuánto de nosotros queda dormido en nuestro olvido sin tener la menor posibilidad de aparecer?
Sostengo planificar es el recurso que nos puede ayudar a que esto no suceda. Planificar es generar una estrategia de acciones previamente ordenadas que nos lleven hacia nuestros objetivos.
El olvido o la postergación se dan cuando no hacemos importante algo y lo dejamos a la deriva sin planificar. Pareciera que cualquier momento fuera bueno pero “cualquier momento” no llega nunca y finalmente queda sin hacer.
La clave no es dar prioridad a lo que está en la agenda. Sino ordenar la agenda por prioridades.
Todos tenemos la misma cantidad de horas y es obvio que no todos hacemos igual uso de ellas, para no hablar de la rentabilidad diferente que conseguimos. La clave está en la eficiencia al momento de planificar.
El aprovechamiento del tiempo se relaciona con la capacidad de accionar en forma planificada basándose en prioridades y enfocándose en lo que hace falta hacer. Un buen plan nos quita presión y estrés vaciando nuestra cabeza de temas que no tienen que ser enfocados en el aquí y ahora.
Planificar contribuye a que tengamos una actitud positiva de acción en lugar de preocuparnos. Nos da poder cuando comprobamos que nos lleva por el camino de nuestros sueños.
Ventajas de la planificación:
- Ayuda a tu crecimiento personal.
- Permite que actúes y no reacciones.
- Ayuda a desarticular olvidos y postergaciones.
- Ayuda a capitalizar oportunidades.
- Te proporciona dirección.
- Te entrena a pensar en el futuro y a lograr lo que quieres.
- Ayuda a hacer un mejor uso del tiempo
- Te permite medir tu efectividad frente a los logros.
Ahora pregúntate:
- ¿Qué hábitos te gustaría desarrollar?
- ¿Qué sería lo que más te gustaría experimentar?
- ¿A qué le vas a decir que no el próximo mes?
- ¿Qué te gustaría crear en tu vida?
- ¿A qué proyecto personal te gustaría dedicarte?
Te invito a contestar estas preguntas para cada área de tu vida:
Relaciones – Capacitación – Trabajo – Dinero y Finanzas – Tiempo Libre – Espiritualidad
Los líderes efectivos no son predicadores, son hacedores.
El plan aparece cuando empiezas a contestar las siguientes preguntas:
- ¿Qué quieres?
- ¿Para cuándo lo quieres?
- ¿Dónde se va a desarrollar?
- ¿Quiénes son las personas involucradas?
- ¿Para qué lo quieres?
- ¿Por qué lo quieres?
- ¿Con qué recursos cuentas?
- ¿Qué recursos te faltan?
- ¿Cómo se hace?
- ¿Cuáles son las acciones que te llevan a ese resultado?
Yo no soy lo que me toco; soy lo que elegí ser”.
Yo no tengo lo me tocó; tengo lo quiero.
Ojo pero no olvides el verdadero propósito de la vida:
Experimentarte y ejercer lo que realmente eres: Un creador.
Hacer lo que realmente debes: Vivir permanentemente en el único espacio que existe, el Presente. Sanar la creencia de la separación; es decir, vivir en completo estado de unidad, llevándote a sanar las relaciones.
¡Feliz día para todos!
Balaram
UNIVERSIDAD DE CONSCIENCIA
Director y Fundador